Parábola Del Escritor


Porque así lo quiso Dios, empecé a escribir desde muy pequeño. Mi primer cuento fue sobre un soldado de plomo que deseaba ser de carne y hueso para poder combatir. Luego de escuchar mi relato en la voz de una profesora de primaria y el aplauso sincero de mis compañeros de aula, sentí que escribir era lo mío. Hace unos días me pidieron ser redactor en la revista de la universidad donde estudio, me sentí como aquel niño de nuevo. Espero que esta nueva aventura periodística traiga éxitos personales, los cuales no son más que el resultado del cariño y la comprensión familiar.