Reflexión de Semana Santa

Hoy fui a comprar clavos y me acordé de Jesucristo, un personaje olvidado por la mayoría de cristianos. ¿Desde cuándo pasa esto? quizás la poca fe de la actual sociedad se vuelve en su contra, como aquella noche donde Judas le dio el beso de la traición.

Consumismo, nuevas sectas religiosas, adicción al sexo y demás placeres de nuestro día a día hacen imposible poder ver a esta hombre treinteañero, sin más armas que su florido verbo. Quizás no seas un creyente pero no puedes dejar de estar de acuerdo en lo que predicó.

Yo no soy un hombre religioso, tampoco mucha gente que conozco, igual le agradecemos el valioso acto de haberse inmolado por estos días feriados. Gracias Jesús, eres tan grande como Miguel Grau, sin ustedes no habría tanto descanso.