Cazando un Caso


Pandillas y juventud en los barrios:


Quizás algunos burgueses no se imaginan lo peligroso que pueden llegar a ser los pandilleros, ya que no viven en carne propia la crueldad de sus actos. Por este motivo es que la lucha contra esta lacra social no ha ayudado a contrarrestarla. Es muy fácil crear dispositivos o normas legales, estrechar la mano de políticos chiflados y sonreír a las cámaras. Lo difícil es hacer que todas esas leguyadas tengan un valor en la realidad. Las leyes deben asemejarse a la realidad y no la realidad a ellas. Es por eso que, para hacer de una vez frente a esta cuestión social, no es necesario llamar a expertos extranjeros. El pueblo debe debatir, tomar el control de la situación y autogestionarse para obtener el éxito. Sin dolor no hay victoria.